Se fue la luz...
Maldita luz. Y de pronto parece que nadie se percata de la libertad... y sólo vemos y reclamamos nuestras cadenas... gritamos para que nos devuelvan lo que nos convierte en obedientes y estúpidos borregos...
Yo la uso... lo sé... y me aprovecho de ella para llegar a donde por mi puño y letra no podría llegar... Me aprovecho de la electricidad para hacer mi mundo un poco más grande y para lanzarme de cabeza al mundo y al misterio que me rodea... Pero qué pasaría si no tuvieramos luz? Si no tuvieramos televisión?
deberíamos aprender a usar la tecnología... a dosificarla...
Aprender a apagar de vez en cuando y escuchar el silencio... esos densos sonidos que nos regala el silencio... oir respirar a la otra persona... escuchar el viento susurrando entre las ramas de los árboles... o el rugir de las olas del mar... ESCUCHAR y aprender a frenar un poco nuestro ritmo demasiado frenético para darnos cuenta que la vida se nos escapa... segundo a segundo... y no la vivimos....
En vez de caceroladas... una bonita historia a la luz de las velas....
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